Llega el verano y comienza el cambio de rutina para todos en casa. Ya los niños no deben ir al colegio, por lo que se presentan siempre las grandes preguntas ¿Qué hacen con tanto tiempo de ocio en la casa? ¿Es una opción los deberes en esta época estival? Por otra parte, ser padres es un trabajo a tiempo completo, no tiene vacaciones.
Son muchos los casos de padres que deben seguir con su rutina laboral al contrario que sus hijos, por lo que surge la necesidad de encontrar un plan b.
Aun así, las vacaciones son una buena época para disfrutar del tiempo en familia, de visitar nuevos lugares y de, por qué no, aprender juntos. Este tiempo libre puede servir de puente para que el compartir en familia se convierta en algo más, una enseñanza, repaso de lo aprendido o, quizás, un refuerzo de normas inculcadas durante el año escolar.
Por su parte, el Colegio Europeo de Madrid y la Escuela Infantil Europea Bebin, resaltan la importancia de que durante verano los niños tomen un tiempo para distraerse, siempre y cuando sigan adquiriendo responsabilidades. Por ejemplo, ayudar en tareas del hogar, tener a su cargo la limpieza y orden de su cuarto y zonas de juego, seguir un horario de dormir y comer, entre otras.
Ser padre no tiene vacaciones.
Es importante entender que también va a depender de las edades. Cada tarea o norma tiene que adecuarse a las diferentes necesidades, por lo que puede ser de mucha ayudar apoyarse en las responsabilidades y material aprendido en curso escolar.
Por esto, hoy te damos algunas opciones para mantener una rutina divertida y de aprendizaje durante el verano junto a tus hijos.
- Mi casa, tú casa:
Para los niños, es muy importante entender que para que su casa está limpia y ordenada como están acostumbrados a verla, hay muchas tareas que realizar. Así que mientras estén pasando más tiempo en ella, entrégales ciertas responsabilidades del cuidado y orden de la misma, esta es una buena forma de inculcarles responsabilidad y disciplina. Tareas sencillas como lavar los platos luego de la comida, tender la cama al levantarse por las mañanas, ordenar los juguetes al terminar de usarlos, ayudar con el jardín, el cuidado de las mascotas y más. Recuerda que todas estas tareas y responsabilidades dependerán de las edades.
- Para aprender, el tiempo es oro:
Lo que se ha aprendido durante el año escolar es importante mantenerlo, practicarlo o avanzar para estar más preparado para lo que vendrá. Por lo que algunas horas a la semana de repaso escolar no vendrán mal. Establece un cronograma con tus hijos donde se especifiquen horas de lectura o prácticas que vayan muy de la mano con el contenido que han adquirido o tendrán que ver en el colegio.
- Donde menos lo pienses hay una enseñanza:
Además de repasar o adelantar materias, puedes encontrar en diferentes actividades de ocio cotidianas que se conviertan en buenas maneras de captar su atención y enseñarles contenido que les servirá para la cotidianidad y para las materias curriculares de sus estudios. Por ejemplo, utiliza películas bilingües para aprender un nuevo idioma o basadas en hechos históricos para aprender un poco de cultura nacional y universal. También, puedes visitar museos, realizar lecturas familiares, cocinar entre otras muchas actividades. Recuerda que en todas estas acciones hay un aprendizaje, solo debes comenzar a sacarles provecho.
- Cuanto más cerca está la meta, más divertido se hace el camino:
Establecer metas es una manera de incentivar a los niños en el proceso de aprendizaje. Por lo que, colocar retos, pruebas o fechas de cumplimiento se pueden convertir en una carrera divertida para que durante esta época de verano el aprendizaje sea un eslabón más del disfrute familiar. Por ejemplo, si van de viaje a la playa o si se tiene pensado visitar nuevos lugares, puedes proponer que aquel integrante de la familia que consiga más datos curiosos o históricos de la ciudad, pueblo o país, conseguirá un regalo al finalizar la visita.
- Con buenos amigos, no hay malos momentos:
Tanto en la infancia, cómo en la adolescencia, las amistades forman una parte importante de la vida y prioridades de los niños y/o jóvenes, por lo que organizar actividades grupales donde se puedan incluir a los amigos de tus hijos y/o a parejas amigas que también sean padres, puede tornarse un ambiente tan divertido como educativo. Planifica visitas colectivas, búsquedas del tesoro, gincanas o cualquier tipo de juego donde puedan establecer metas de trabajo en equipo, liderazgo y responsabilidad, aspectos que son de vital importancia pata todas las edades.
Recuerda que el aprendizaje no tiene porqué ser aburrido, ni las vacaciones un tiempo donde se pierda y olvide todo el conocimiento. En el equilibrio está la magia.
También puedes consultar otros artículos que te pueden ser de mucha ayuda este verano:
- 6 ideas divertidas para realizar deberes en verano
- English holiday: 5 tips para practicar inglés en vacaciones
- Películas animadas para aprender inglés
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¡Felices vacaciones!