A lo largo de las últimas décadas, los aspectos que influyen en la elección de una carrera profesional han variado notablemente. Este cambio de tendencia ha tenido un impacto en el sector de la educación superior, que se ha vuelto cada vez más competitivo.

Actualmente, el número de estudiantes universitarios es cada vez mayor. Aun así, las instituciones tienen que esforzarse para conseguir que los mejores alumnos estudien en sus centros. Ante semejante competencia, deben reconocer y adaptarse a las nuevas tendencias que marcan el proceso de elección de estudios por parte de los futuros estudiantes.

Con el objetivo de descubrir las tendencias y el comportamiento de los futuros estudiantes durante el proceso de acceso a la universidad, los portales educativos educations.es y educations.com han llevado a cabo un estudio en el que han participado alrededor de 20.000 estudiantes. Los resultados han permitido observar un cambio en las motivaciones que guían la elección de estudios superiores y los aspectos que determinan en qué  universidad estudiar.

Hacia unos estudios más personalizados

Los factores que se tienen en cuenta son muy variados. Aspectos económicos como el coste de vida del lugar de estudio o las tasas universitarias son preocupaciones que se han mantenido a lo largo de los años. El estudio muestra que este es el segundo aspecto más importante para futuros estudiantes en la elección del programa, seguido de los requisitos de admisión.

Sin embargo, el cambio de tendencia se observa en la principal motivación para elegir grados y posgrados.


El estudio revela que los estudiantes eligen qué estudiar de acuerdo a sus pasiones y gustos personales.


Estos anteponen sus preferencias a otros elementos como las salidas profesionales o la reputación de los programas. Un hecho que rompe con las tendencias de las últimas décadas en las que la reputación reflejada en los rankings educativos era un indicador muy valioso.

Esta nueva tendencia tiene impacto en todos los niveles de la educación superior, especialmente en las estrategias de atracción de estudiantes. Actualmente, las universidades deben adaptar sus esfuerzos a los intereses de sus futuros alumnos con el objetivo de convencerlos para que soliciten entrar en sus programas.

La calidad educativa entre los factores determinantes

A pesar de la importancia de la opinión personal de cada individuo, la calidad docente también es uno de los factores que se tienen en cuenta. Un 44% de los futuros estudiantes afirma que la calidad de la enseñanza se encuentra entre los principales motivos que influyen en la opinión que se forman sobre el programa después de realizar la primera toma de contacto.

En este sentido, cuando la decisión trata sobre qué universidad elegir, la enseñanza pasa a ser el principal factor para futuros estudiantes. De esta forma, aquellos centros que ofrezcan un programa que se ajuste a los intereses de los alumnos y que, además, pertenezcan a una universidad que cuente con buena reputación respecto a la calidad docente, serán los que lo tendrán más fácil para atraer a los mejores alumnos.

Este factor también tiene un peso muy importante cuando se realizan estudios en el extranjero. El estudio muestra que los estudiantes de países nórdicos se encuentran entre los que más se preocupan por la calidad de la docencia al elegir destino para estudiar fuera de sus países. Respecto a este tema, Suecia es uno de los países más valorados por los participantes en la encuesta en materia de calidad educativa.

En relación a este aspecto, otros lugares europeos como Suiza o los Países Bajos son el segundo y el tercer mejor país con una mejor enseñanza respectivamente, según el estudio.

Otra tendencia que se expande por Centroeuropa con países como Alemania, es la combinación de la calidad docente con las salidas profesionales. Esto supone un atractivo adicional para estudiantes de todo el mundo que buscan expandir sus conocimientos con la mejor formación adaptada a sus intereses.

Más información:

www.educations.com