Para mí no existe una metodología perfecta y esto es algo que todos los docentes debemos tener claro desde el principio. Cada uno de nuestros alumnos tiene unas características propias de aprendizaje que hacen que se sientan más cómodos con un tipo de metodología que con otro.

Así, mientras los alumnos más dinámicos y pragmáticos se encuentran cómodos con metodologías activas, los más introvertidos y analíticos tienden a manejar mejor aquellas más conductistas. Por eso, en mi práctica diaria, soy partidario de ir variando las metodologías, para que todos los niños tengan las mismas oportunidades de desarrollar sus potencialidades individuales.

Éstas son las metodologías que más utilizo en mis clases:

  • Aprendizaje cooperativo: Se trata de organizar pequeños grupos en los que los alumnos trabajan conjuntamente de forma coordinada para resolver alguna tarea concreta.
  • Aprendizaje colaborativo: Muy similar al anterior. Mientras que en el cooperativo el maestro es el que plantea el problema, organiza los grupos y distribuye roles, en el aprendizaje colaborativo es el grupo el encargado de organizar toda esta estructura.
  • Aprendizaje basado en proyectos: Es mi favorita. Es un conjunto de tareas individuales y/o grupales que implica al alumno en el diseño y planificación del aprendizaje, en la toma de decisiones y en procesos de investigación, teniendo que trabajar de manera autónoma durante la mayor parte del tiempo. Culmina con la realización de un producto final, que debe ser presentado ante los demás.
  • Aprendizaje basado en investigaciones: Muy semejante a la anterior, pero basado en la utilización de métodos científicos.
  • Gamificación: Es la integración de dinámicas de juego adaptados al aula en entornos no lúdicos. Para la gamificación, yo suelo utilizar insignias o badgets.

Pero, ¿qué tiene en cuenta Toni García a la hora de diseñar sus proyectos?

Fundamentalmente los siguientes aspectos:

Sus proyectos

En la actualidad, Toni da clases a alumnos de sexto de primaria. En el siguiente listado se pueden leer alguno de los proyectos que actualmente está desarrollando con ellos.

  • Creación de un restaurante (por grupos). Para ello, los alumnos tienen que:
    • Elegir un menú preferiblemente saludable.
    • Realizar la compra de los productos de manera virtual, ya sea a través de la tablet o de folletos de supermercado.
    • Calcular el coste del menú.
    • Elaborar una carta atractiva.
    • Realizar la maqueta del restaurante.
  • Elaboración de un viaje (por grupos). Para ello, los alumnos tienen que:
    • Elegir una ciudad que desean visitar.
    • Buscar vuelos y hoteles con unas características concretas (con las menos escalas posibles, buena relación calidad/precio, a menos de tres kilómetros, etc.)
    • Buscar 5 monumentos que se deban visitar.
    • Buscar entradas a los lugares más interesantes.
    • Elaborar un cartel publicitario.
    • Elaborar un tour del viaje.
  • Proyecto para salvar los mares (individual y por grupos). Para ello, los alumnos tienen que:
    • Visualizar vídeos sobre la problemática de la contaminación de los mares.
    • Realizar un trabajo de investigación donde deberán buscarán información sobre la contaminación en el medio ambiente, particularmente sobre el plástico en los mares y océanos.
    • Realizar un mural con los datos obtenidos.
    • Realizar un mural-decálogo (A4 o A3) para mejorar el reciclaje y que se produzca una menor contaminación con:
      • 10 acciones para casa.
      • 10 acciones para el colegio.
      • 10 consejos para los supermercados.
      • 10 propuestas para el ayuntamiento.
    • Para finalizar, elaborar un cartel y un spot publicitario para fomentar el reciclaje y/o para concienciar contra la contaminación.

La actitud del docente

En todo este proceso, uno de los aspectos más importantes es la actitud del docente. Debemos tener en cuenta que en estos proyectos, son los alumnos quienes desarrollan sus técnicas y estrategias de aprendizaje autónomo, por lo que es muy importante que fomentemos y guiemos ese aprendizaje de un modo muy positivo, pues los problemas y dudas que van a surgir son mayores que en aprendizajes más analíticos. En este sentido, mi actuación como docente es la siguiente:

  • Al inicio del proyecto, trasmito cuál es el producto final (un cartel publicitario, un menú saludable, etc.)
  • A continuación, doy a los alumnos la información sobre cada una de las fases o tareas intermedias del proyecto.
  • Durante las sesiones posteriores, mi tarea se centra en guiar, encauzar y conducir hacia la resolución grupal o individual de los problemas que puedan ir surgiendo. Todo esto en un entorno positivo, donde el error forme parte del propio aprendizaje y donde el alumno se sienta libre para experimentar, probar y equivocarse.

Podéis encontrar los proyectos que estoy realizando con sus fichas y sus aspectos metodológicos  AQUÍ.