Para la llamada Generación Z, las redes sociales se han convertido en su principal vía de comunicación. No sólo hacen amigos, sino que también son activos creadores de contenido. Por otro lado, podemos encontrar varios casos de profesores que están aplicando actividades en clase con las redes sociales, con resultados exitosos. Analizaremos su uso con fines educativos y os daremos 6 consejos para trabajar con las redes sociales en clase.

Trabajar con las redes sociales en clase, ¿si o no?

Puede surgir la duda de si vale la pena utilizar las redes sociales como herramienta educativa o si, al contrario, puede llevar a distracciones. 

Según Cristian Olivé, profesor de Lengua de Secundaria y habituado a utilizar las redes sociales en proyectos educativos, “es necesario emplear metodologías activas y plantear propuestas ‘reales’ que sean significativas para el alumnado”. En este sentido, “es importante empoderar a los alumnos y tratar de hacer un uso creativo de las herramientas que más utilizan como las redes sociales”.

En consonancia con las palabras de Olivé, hay que tener en cuenta que una de las diferencias entre la Generación Z y otras generaciones es el uso del teléfono móvil/celular como el dispositivo principal. Para ellos, el ordenador u otros dispositivos han quedado en un segundo plano.

A través de sus móviles, la generación Z no solo consume gran cantidad de contenido, sino que también crea su propio contenido: imágenes, videos, memes, gifs, stories. Y esta característica es la que puede usarse de manera positiva para incentivarlos a crear contenido en clases. 

Hábitos de consumo de la Generación Z

Según el Journal of Medical Internet Research, el 78% de los jóvenes considera el móvil su dispositivo más importante. Y según el Pew Research Center, en la actualidad las preferencias de redes sociales entre adolescentes de entre 13 y 16 años son:

  1. YouTube (98%)
  2. Instagram (79%)
  3. Facebook (42%)
  4. Twitter (41%)
  5. Tik Tok (40%)

Otra característica a tener en cuenta es que es la primera generación que se socializa y se educa por Internet. “Ahora, tus amigos los haces en Internet, los deberes los haces en Internet, las dudas las resuelves en Internet”, señala Iñaki Ortega, director de la Universidad de Deusto en Madrid y coautor junto con Núria Vilanova del libro Generación Z.

Por estas razones es que utilizar las redes sociales en clase puede llegar a dar muy buenos resultados. Aquí os dejamos unos consejos para poder llevar a cabo.

¿Cómo empezar a trabajar con redes sociales en clase?

1. Elige los temas correctos: no todos los temas funcionan bien. Uno de las actividades más utilizadas es la de traer a la vida, a través de las redes, a un personaje o figura histórica. Es importante primero visualizar cómo se habría representado a sí mismo el personaje elegido si hubiera tenido las redes sociales. Imaginarse cómo podría haberse debatido un concepto o una idea. De esta manera, se puede tener una idea si el tema funcionará con esta estrategia de redes sociales.

2. Elige las herramientas adecuadas: cada plataforma de redes sociales tiene sus ventajas. TikTok no funciona tan bien como Twitter para el debate y la discusión, pero funciona bien para contar historias cortas y construir historias en base a videos de otros. A la vez, Snapchat, las historias de Instagram y TikTok funcionan bien para grupos pequeños. Es clave estar familiarizado con las plataformas antes de iniciar el ejercicio.

3. Haz que la elección sea colaborativa: la elección y la colaboración son clave para la aceptación de los estudiantes. Involucra a los estudiantes a decidir qué plataforma es la mejor para un proyecto. Una visión compartida del proyecto genera entusiasmo y compromiso. 

4. Participación: como docente créate una cuenta y únete al debate también como otro personaje. O si es un video, haz un cameo, una breve aparición, en los videos de tus alumnos. También, sugiere formas en las que los estudiantes pueden interactuar entre sí haciendo apariciones en los videos de los demás, actuando como extras o personajes de fondo, o interactuando y etiquetándose unos a otros en Twitter. 

5. Considera el acceso a los dispositivos y redes: si los estudiantes tienen dispositivos proporcionados por la escuela, es probable que los sitios de redes sociales estén bloqueados, por lo que deberán usar sus propios dispositivos. También puede pasar que algunos padres o estudiantes no quieran usar las redes sociales. La participación de los estudiantes a menudo requiere el permiso de los padres y del estudiante.

6. Proporcionar alternativas: dar opciones para que los estudiantes que no tienen permiso de los padres para usar las redes sociales no queden excluidos. Pueden actuar como extras o colaboradores sin necesidad de acceder a una cuenta de redes sociales, o pueden crear contenido de redes sociales fuera de línea. La herramienta Tweetgen permite a los usuarios crear tuits falsos, adaptar el tema que se esté tratando o crear videos sin conexión. La experiencia puede ser igual de divertida y atractiva sin hacer que los estudiantes tengan que utilizar Twitter.