Por Miguel García, colaborador de realinfluencers
Hace poco escribíamos acerca del viaje que emprendió el educador, psicólogo e investigador Alfredo Hernando para buscar las escuelas más innovadoras por medio mundo. En él recogíamos las peculiaridades arquitectónicas de la escuela Ørestad Gymnasium en Dinamarca, el milagro de la Barefoot College de Sierra Leona, las ocurrentes ‘Tiendas para recambios de superhéroes’ de Nueva York o las salvadoras ‘Escuelas Barco’ en Bangladesh.
Todos estos ejemplos de innovación se encuentran reunidos en el libro Viaje a la escuela del siglo XXI, en el que el propio Alfredo llevaba a cabo un estudio sobre las escuelas más creativas y rompedoras del mundo. Sin embargo, no sólo las encontró en el extranjero, sino que también destacó algunas dentro de España, con rasgos semejantes a las anteriores.
Y es que, entre las 50 experiencias innovadoras que Hernando estudió a lo largo de su viaje, encontró ciertas características comunes entre algunos colegios nacionales y los ejemplos de innovación que encontró fuera de nuestras fronteras:
“En lo metodológico, comparten herramientas como el aprendizaje por proyectos, las aulas cooperativas, las herramientas de evaluación variadas, los compromisos de aprendizaje entre alumno y profesor, lo natural e invisible de sus edificios digitales, la autonomía que conceden a los alumnos en paisajes de aprendizaje…”
Centros innovadores en España
En este listado de las 50 escuelas más innovadoras del mundo, Alfredo Hernando destacó cuatro españolas: el Centro de Formación Padre Piquer, el colegio Santa María la Blanca (ambos en Madrid), el colegio Montserrat y centro público Mare de Déu de Montserrat (estos últimos en Barcelona):
Centro de Formación Padre Piquer
El milagro de este centro, ubicado en un barrio popular donde el 45% del alumnado es inmigrante, es acabar con el absentismo escolar, producir una eficaz integración de todos sus alumnos y encontrar altos porcentajes de buen rendimiento académico (85%). Todo ello, a través de las llamadas cooperativas multitarea, aulas abiertas que combinan la explicación del profesor con trabajos grupales, de orientación y tutorías.
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Colegio Santa María la Blanca
Basa su proyecto en la atención individualizada de las necesidades de sus estudiantes, midiendo los resultados que esta atención genera en ellos. A través del Proyecto de Educación Básica Interactiva, cambia el papel del docente, de las aulas e incluso de las actividades extraescolares.
Colegio Montserrat
Este colegio se centra en los intereses e inquietudes concretas de los alumnos, a través de proyectos cooperativos, donde el profesor asume un papel de ‘coach’. Su directora destaca que:
“los resultados son unos alumnos no sólo preparados para tener éxito académico, sino personas de mentalidad abierta, capaces de ser agentes de transformación, a las que les gustan los retos y prefieren llegar a las metas con otros”
Centro público Mare de Déu de Montserrat
Aquí derriban barreras arquitectónicas -como las clásicas tarimas o los propios tabiques que dividen aulas-. Reemplazan las clásicas clases magistrales de una sola asignatura, seguidas de exámenes, por proyectos en los que agrupan toda la materia e incentivan el trabajo grupal. Sus responsables destacan que la innovación de estos centros no se basa en recursos superiores al resto, sino en el uso creativo que le dan a los existentes:
“La buena noticia es que, con los mismos recursos que tienen las escuelas que les rodean, han llegado a eliminar el fracaso escolar y logran el éxito de todos sus alumnos sin importar su procedencia”
