Por Redacción BlinkEdTech

Hace años que venimos oyendo hablar del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) como algo que cambiaría nuestro día a día de forma significativa.

¿Cómo se producirá este cambio? La conexión a Internet  de las numerosas herramientas y dispositivos que utilizamos a diario (desde el móvil a la TV, el coche o incluso la nevera) revolucionará cómo utilizamos dichos objetos. En algunos casos este anunciado cambio ya se ha producido, pero la transformación ha ido a un ritmo más lento de lo esperado.

El futuro del aprendizaje pasará necesariamente por la integración de la tecnología en el aula

Ahora, sin embargo, su integración toma impulso en casi todos nuestros gestos diarios, ya sea hacer un pago en una tienda o pedir una cita en el centro de salud. Pero ¿qué significa y qué puede aportar el IoT a la educación? Repasamos algunas posibilidades.

Más allá del correo electrónico, las tabletas, o el moodle, el Internet de las Cosas hace posible a los centros educativos implementar un control y una monitorización sin precedentes de los recursos disponibles y, a los docentes, un seguimiento más riguroso del desempeño y asiduidad del alumnado.

Los beneficios de la integración de este tipo de tecnología en el entorno educativo son múltiples y están revolucionando la dinámica en el aula, desde los cursos de Primaria hasta la educación Universitaria. Ahorran tiempo, agilizan tareas y permiten una gestión mucho más eficiente y conveniente para directivos, profesores y alumnos.

Información útil en tiempo real

Con la actual ubicuidad de smartphones y dispositivos wearables, profesores y estudiantes pueden comunicarse de una forma inmediata. Asignar deberes, entregarlos; sugerir fuentes de información y cogerlas.

Con códigos QR los alumnos ganan un acceso más fácil a los recursos de las bibliotecas de sus campus, pueden coger libros y recursos sin necesidad presencial, y aprender por su cuenta.

Saber a qué hora se hará la lección o el taller de una asignatura; recibir un aviso de cuándo va a ocurrir y, si no pueden estar presentes, que puedan asistir de forma remota.

https://www.youtube.com/watch?v=QSIPNhOiMoE

Seguridad en el Campus

Otra de las grandes ventajas del IoT para los centros educativos se centra en la seguridad, física y digital, de su infraestructura. Controlando entradas y salidas de las personas en sus campus, el acceso a la red interna y el seguimiento de los estudiantes es primordial para el funcionamiento eficaz y seguro de cualquier colegio. El Internet de las Cosas lo hace posible.

Un nuevo entorno educativo

Dina Kurzweil y Sean Baker, docentes estadounidenses reflexionaban sobre el tema en EducauseReview:

«Cualquier cosa que nos rodea recopila información sobre nosotros sin que nos damos cuenta: cosas incrustadas en objetos, llevadas sobre nuestros cuerpos, controladas con sensores, desarrolladas para la inteligencia, y creadas para la capacidad de recolección de datos y la comunicación

«Todas estas cosas se comunican a través de la nube, toman decisiones y comparten información. Este es el Internet de las Cosas. Y esto es positivo para la educación»

Desde la integración de las nuevas metodologías educativas hasta los medios emergentes como la realidad virtual y aumentada, el futuro del aprendizaje pasará necesariamente por la adopción de la tecnología en el aula como forma de mejor conectar con los alumnos de la generación digital.


Referencias:


Foto: Pixabay.com